Primero que nada Opinión Merengue les desea un año 2016 lleno de grandes logros y mucha salud a todos los lectores y que nuestro equipo nos devuelva las alegrías y el juego de antaño.
El 2015 ha sido un año de esos que simplemente toca olvidar, hacer borrón y cuenta nueva para enfocarse totalmente en lo que viene, mejorar lo que se ha hecho y arreglar el camino. O eso es lo que debería pasar en este Madrid pero lamentablemente nada nos da seguridad de esto.
Sin embargo estos últimos meses nos han dado algo muy pequeño para rescatar pero que de mantenerse así puede convertirse el algo muy provechoso para el presente y el futuro del Real Madrid. Hago referencia al príncipe de Gales, ese jugador de 26 años que esta llamado a ser el próximo máximo exponente del fútbol del equipo blanco. Desde la llegada de Gareth Bale las criticas, un poco injustas a mi parecer, han rodeado al jugador. Debemos recordar que este jugador nos dio dos importantes goles en el año de los cuatro títulos y una primera temporada en el equipo con números muy buenos.
Su segunda temporada quedó para el olvido, como la de todo el equipo, pero el tema central aquí es la presente, en los últimos encuentros hemos visto a un Bale que rescata la tan aclamada BBC ya que ha sido el jugador más balanceado del tridente, ha mostrado calidad y mucha actividad dentro del campo. La situación actual de equipo puede llegar a opacar su buen rendimiento pero es algo que no podemos pasar por alto.
El expreso de Cardiff ha disputado 12 partidos en la temporada 15-16 de La Liga, ha marcado ocho (8) dianas para ser el 3er máximo goleador del equipo por detrás de Ronaldo y Benzema, además no solo finaliza las jugadas sino que también hace jugar a sus compañeros ya que posee siete (7) asistencias y se sitúa como el mejor asistidor del torneo, está empatado con Neymar pero hay que destacar que Bale ha conseguido este número en una menor cantidad de partidos.
La sensación dejada por el jugador en el mes de diciembre ha sido notable, nos ha mostrado mucha participación en el juego merengue al moverse constantemente por el campo, desbordando juego por ambas bandas y esto lo ha llevado a ser un constante peligro para el rival ya que tiene 37 disparos hasta hora. Al momento de jugar en equipo ha demostrado que sabe hacerlo, se ofrece para recibir pases y también sabe enviar centros peligrosos como el que vimos en el partido frente a la Real Sociedad. El británico goza de una libertad que le ha beneficiado sin lugar a dudas, en los últimos encuentros se ha vuelto omnipresente dentro del campo.
Ese es el Gareth Bale que necesita el Real Madrid, que sea un verdadero peligro para el rival y que ayude a construir el juego del Real Madrid. Personalmente creo en el gran potencial de este jugador y que de continuar en el equipo puede dejar unos números de gran nivel, además de conseguir grandes títulos. Solo pedimos que esto se transmita a los partidos de gran importancia frente a rivales de alto nivel y que poco a poco su figura se afiance más dentro de la plantilla.
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